Tras su derrota, el candigato Morris amenaza con unirse a MORENA

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Saludos, paisanos. Continuamos en nuestro viaje temporal por el mundo del cómic. NO toquen nada o producirán un efecto mariposa de esos que destruyen el continuo espacio-tiempo a la Brian Bendis o Geoff Johnes. Empecemos con DC Comics. Como recordarán, durante la Semana de Superman les dije que en el evento Our Worlds at War apareció un nuevo Suicide Squad, que fue casi totalmente mascrado tras su debut; también en ese crossover murió el legendario Sargento Rock. Bueno, pues en ese mismo año de 2001 y en los mismos títulos de Superman, hubo otra versión del Escuadrón Suicida con, más o menos, buena recepción de los lectores. Con este antecedente, a finales de ese año, le dieron a la leyenda viviente del cómic, Keith Giffen, la oportunidad de escribir una nueva serie regular del Suicide Squad. El nuevo grupo conjuntaba nuevos personajes y viejos conocidos, todos dirigidos por... ¡el Sargento Rock! ¿Pero qué no estaba muerto? Pues sí, aunque también había muerto una vez en la Segunda Guerra Mundial, así que la cosa era mucho más confusa. En fin, este nuevo Escuadrón estaba bajo las órdenes directas del presidente Lex Luthor, con apariciones frecuentes de la siempre metiche y rolliza Amanda Waller (aún era gorda, no la buenona que conocimos tras el reboot). Al estilo de la jamás olvidada JLI, los guiones de Giffen irradiaban buen humor, en contraste con el tono fatídico que rodeaba al equipo, e incluyó pesos completos como Power Girl, Deadshot y Major Disaster, pero no sé si el momento de su publicación no fue el correcto o simplemente no hubo empatía con los lectores y la serie se canceló al año. Al final, el sargento Rock dejó ver que no era el original, pero huyo antes de descubrir su verdadera identidad. Dato curioso: Havana, una de los miembros base del grupo, resulto ser hija de la propia Amanda Waller. Y ya que menciono a la morenaza, se supone que ese Escuadrón no se desintegró tras la cancelación de su serie y que Waller los siguió dirigiendo en misiones encubiertas. Quizá lo más notorio de esta serie es que marcó la entrada del artista Paco Medina a las grandes ligas del cómic gringo.

Vamos con Marvel, específicamente al año 2004 y el lanzamiento de la serie The Pulse, obra de Brian Michael bendis y que hizo oficial como parte del universo Marvel regular a Jessica Jones, protagonista de Alias; incluso el co-creador del personaje, Michael Gaydos, dibujó uno de los arcos argumentales. El Pulso era una sección del diario El Clarín (o Bugle) dedicada a los superhéroes y Jessica fue contratada como asesora de contenidos, después de ganarse la confianza del viejo Jonah Jameson tras los eventos vistos en el cómic Alias (ya publicado en México), aunque no era la única protagonista, también aparecía Luke Cage, Ben Urich y demás personal del diario. El cómic no fue una gran suceso comercial, pero fue bien recibido por la crítica y hay que notar que, al ser escrito por Bendis, era una especie de tie-in o prólogo no oficial de sus otros cómics; por ejemplo, en Secret War, Luke Cage caía en coma tras un ataque de supervillanos y aquí vimos como salió de él; también fue la primera aparición de Hawkeye tras su resurrección en House of M y presenciamos el nacimiento de la hija de Jessica y Cage. Dato curioso: en The Pulse, Urich sacó a la luz que Norman Osborn era el Duende Verde y fue encarcelado por sus crímenes, pero Mark Millar lo ignoraba y en Marvel Knights Spider-Man mostró otra versión de cómo Norman era capturado y enjuiciado; aunque era un problema de continuidad, ambas ideas eran técnicamente compatibles, así que no pasó de un detalle anecdótico. The Pulse duró 14 números, más una edición especial, impresa tal cual cómo un suplemento de periódico y contenía noticias de House of M. Al final de la serie Jessica renunció al Clarín, en represalia por los insultos de Jameson a la nueva alineación de Vengadores ,tal como se vio en New Avengers y en secreto aceptó casarse con Cage lo que, de nuevo, nos conduce directamente a la continuidad vengadora. También destacar que el primer arco argumental de The Pulse fue trazado por otro conocido colaborador de Bendis, Mark Bagley.

Para terminar por hoy, vamos con su sección no tan favorita: El Segundón Muti de la Semana.

Hoy toca el turno de Fantomex, creado por Grant Morrison y el dibujante Igor Kordey para el número 128 de New X-Men en 2002. En ese número se presentó como el mejor ladrón de Europa, aparentemente francés, buscando la ayuda de los Hombres X pues no sólo era ratero sino también mutante y había un precio por su cabeza ya que era buscado por robar información de Weapon Plus, la orgranización responsable del proyecto Arma X (que recuerden no es letra sino 10 romano, según Grant Morrison). Con la ayuda de Jean Grey derrotó al Arma XII, que podía controlar mentalmente a los hombres y animales a su alrededor, pero no sin que antes Jean descubriera que Fantomex era en realidad el Arma XIII. Años atras, su madre fue injertada con organismos nanotecnológicos, dando como resultado que su hijo naciera con poderes que incluyen la creación de ilusiones ópticas y múltiples cerebros originados por su sangre llena de bichos cibernéticos; y si las cuentas de la edad de Fantomex no les salen, lo que pasa es que Weapon Plus mandaba sus experimentos a un sitio extradimensional conocido como The World, donde eran adiestrados y crecían más rápido que en el mundo normal. Pese al engaño, Fantomex no era una herramienta de Weapon Plus, así que los Hombres X lo dejaron ir en paz y antes de que terminara la etapa de Morrison lo vimos un par de veces más, incluyendo la batalla final contra Xorn durante el arco Planet X. Dato curioso: Morrison se inspiró para la creación de Fantomex en Diabolik, un personaje del cómic italiano, el cual a su vez se basa en Fantomas, el antihéroe de la literatura francesa que tuvo su historieta por muchos años en México; incluso, se dice que Morrison le puso la terminación mex a su creación como homenaje a nuestro país. Tras la salida de su creador de los títulos mutantes (y de Marvel), Fantomex tuvo una aparición más y fue asesinado... o eso parecía, porque ya saben que en esto de los cómics la muerte es sólo una eventualidad. Tras un par de eventos más, durante Dark Reign Fantomex estuvo en oposición a Norman Osborn y su gente, lo que lo llevó a unirse a los mutantes disidentes de Cíclope en la isla de Utopía. Reciéntemente, se unió a la X-Force de Wolverine y, quienes estén leyendo su cómic que actualmente se publica en México, ya sabrán el papel que está jugando en ese grupo, mostrando que podría ser el más extremo de todos sus miembros, sin miedo a hacer las tareas más sucias. Como el cómic está en desarrollo en nuestro país y parece que con buenas ventas, no les contaré lo que vendrá en la vida de Fantomex, pues pronto lo descubrirán. Este héroe (o antihéroe) también tiene una nave llamada E.V.A que juega un papel importante en sus aventuras, pues no es sólo su medio de transporte sino que es... ¡su propio sistema nervioso! Suena raro, pero al parecer surge de su propio cuerpo y, cuando no está dentro de él, no siente ningún dolor; sin embargo, ella sí siente el daño y él también sentirá lo que le pase a la nave. Eso es todo por hoy, la próxima semana más de Marvel y DC. Hasta entonces.