Más masculino que Burt Ward

NANANANANANA NANANANANANANANANANA ¡ROBIN!

Saludos, gente chispeante... es sexual. Continuando con los festejados del mes, hoy les hablaré sobre la miniserie de 4 capítulos Robin Year One, con trama de Chuck Dixon y guion de Scott Beatty, publicada por DC en el año 2001. Podrán imaginar que cuenta las primeras aventuras de Dick Grayson convertido en chico maravilla, pero no es una revisión de ideas viejas sino nuevas. Sin spoilear todo, aquí algunas novedades: el primer caso de Dick fue una serie de secuestros para trata de blancas (muy actual) y a diferencia de lo que siempre creímos, Batman sí escuchaba las advertencias de no involucrar un adolescente en su lucha contra el crimen, eventualmente le prohibió ponerse el traje y él, huyendo de Bruce, se unió a la Liga de Asesinos. Claro que al final todo salió bien y el dúo dinámico se reunió. Quizá lo más destacable de la miniserie es haber sido el primer proyecto importante en Estados Unidos de los artistas Javier Pulido y Marcos Martin, hoy muy solicitados... en Marvel Comics. Tuvo buenas críticas. Los mismos guionistas escribieron en el cómic Nightwing (números 101 al 106) en el año 2005, junto al dibujante Scott McDaniel, el arco argumental Nightwing Year One, que recontaba la transición de Robin a Ala Nocturna, de nuevo sin importarles mucho las historias previas. El cambio  más importante fue que Batman le quitó el empleo a Dick por ser incapaz de cumplir con todos sus deberes con los Titanes y la universidad -antes decían que fue él quien decidió alejarse de Bruce por considerar que sus métodos se habían hecho muy violentos-, también rehicieron su encuentro con su sucesor (Jason Todd) y suavisaron un poco su separación del murciélago, porque acabaron entendiendo los motivos de uno y otro, mientras que en la continuidad original pasaron muchos años casi odiándose.

Para redondear el post, mencionar que los mismos guionistas hicieron una secuela de Robin Year One, en el año 2003, esta vez Batgirl Year One, con la inusual cantidad de 9 episodios. Ya sin Pulido, Martin realizó el arte. Para variar, hicieron lo que quisieron con el personaje y va lo destacado: Bárbara fue una niña genio que se graduó de la universidad siendo apenas adolescente -lo que tenía más sentido al pensar en su futuro como Oráculo-; sin ambigüedades, la establecen como hija de Jim Gordon (no sobrina ni hija ilegítima) y es él quien indirectamente la orilló al vigilantismo, pues deseaba ser policía y Jim se lo prohibió para evitar los riesgos de la profesión. Dato curioso; tampoco la aceptaron en el FBI, en parte por la edad y en parte por chaparra... ¡en serio!. Es cuando decidió usar un traje modificado de Batman, aunque no en plan de homenaje sino burla; éste no lo tomó de buen agrado y en particular tuvo un muy mal inicio con Robin. En fin, no les contaré más porque es una buena historia, reconocida por la crítica, que vale la pena leer, en especial porque le da su lugar justo a Batichica como mujer fuerte e independiente, no una fanática de Batman como en sus primeros años. También aparecen en la miniserie Wildcat, Doctor Fate, Canario Negro y Jason Bard, el eterno amor de Bárbara en las viejas historias. Todos los cómics que comenté hoy pueden conseguirse individualmente y hay un recopilado gordo que incluye Robin y Bargirl Year One. Eso es todo por hoy, la próxima semana otro festejado. Adiós.