NALGAS FRÍAS ARCHIVOS SECRETOS #4

PREVIAMENTE

Mientas todo era paz y tranquilidad, nuestros héroes se vieron atacados por diversas personalidades cuando se encontraban separados.

Diavolo y Diego fueron atacados por un joven Stark, pero gracias al poder escondido de Diavolo, lograron obtener la victoria.

Oscar, gus y el casto fueron atacados por un renovado Osmar transformado gracias a la fórmula del Marvel Zombie. Con sus nuevos poderes cambió al casto por uno de otra realidad mucho más débil, siendo este Arturo G. Marín, quien cayó en batalla y ahora se encuentra al borde de la muerte.

Pero lo más importante de todo es lo que sucedió en el espacio, después de que se experimentara en los restos del Sr. B, volvió a la vida mucho más poderoso y con forma de simbionte, el cual absorbió la ciudadela en la que lo crearon. Hambriento de peyote, envía un pedazo de él mismo a la tierra y se apodera de Daniel. Ahora está en busca de su hogar, pues en la bodega se encuentra una gran ración de peyote y está dispuesta a llevarla a la gran ciudadela espacial.

Es por eso que Vonice decide reagrupar a los integrantes que siguen de pie del equipo y ahora el objetivo primordial es detener al Sr. B.

Hoy verán: “La Alianza de Maldad”

En una carretera que lleva a Bullpene City…

Osmar: A la verga, esto me pasa por no sacar la pinche licencia, ya llevo como tres días caminando.

Osmar: Pero no importa, ya que llegue a Bullpene lo haré mío, someteré a Don Gio y a todos sus seguidores. Seré el nuevo monarca, mis planes editoriales serán lo mejor. ¿Eh, quién anda ahí?

Cerca de ahí…

-Joarrr-Joarrr-
El Sr. B reportándose a la Ciudadela. Adquirí a mi viejo huésped, Daniel, el meón. Salió mejor de lo que esperábamos. Hurgué en su mente y descubrí que en su casa tiene una bodega con todo el peyote suficiente para dominar medio universo. Con suerte, no me toparé con sus novios los Nalgas Frías. Estaré de vuelta muy pronto…

Mr. S: ¿Quién anda ahí?

De repente, el Marvel Zombie toma un pié del Sr. B y lo estrella contra el piso.

Marvel Zombie: ¿Quién eres y por qué te cruzas por mi camino?

El Sr. B a como puede se pone de rodillas y le da la espalda al zombie.

Sr. B: Yo soy… Tu futuro amo… Me puedes servir bien… Eres fuerte…
Marvel Zombie: ¡Jaaa! Quedaste pendejo por mi ataque, ¡dime quién eres!
Sr. B: ¡Soy el Sr. B!

El simbionte ataca, tomando nuevas formas y creando extensiones de su inestable cuerpo.

Sr. B: ¡Revélate ante mí!

Con su gran poder, le corta la cabeza al zombie, y este al verse en grandes problemas muestra su verdadera identidad, Osmar.

Osmar: ¡Me rindo! No me hagas daño, podemos trabajar juntos piénsalo bien.
Sr. B: Lo he pensado y tienes razón, lo supe desde el momento en que me pusiste tus mierdas manos encima, eres fuerte, demasiado, pero no tanto como yo.
Osmar: Hagamos un trato.
Sr. B: No, no estás en condiciones de pedir, pero yo sí. Harás lo que te ordene, trabajarás para mí, a cambio, te daré lo que nunca soñaste.
Osmar: ¿Bullp…?
Sr. B: Te daré la Tierra. Con mi gran poder podré conquistar el universo, si lo deseas, la Tierra es una parte insignificante de este evento para mí. Es tuya, después de servirme, claro.
Osmar: La… La… Ti… ¿Tierra? Esto es… ¡AMO! (Le besa los pies)
Sr. B: ¡Apártate imbécil! Tu tarea será simple, estarás a mi lado mientras me robo el peyote de la casa de Daniel, el meón. Si llegaran los Nalgas Frías será tu deber impedirles acceso a mí.
Osmar: ¿Eso es todo? Eso, su eminencia, será pan comido. ¡Vayamos!
Sr. B: ¡JAAA!

Mientras tanto, a pocos kilómetros de ahí, Vonice, Oscar y Gus se dirigen a la casa del jarocho en el Nalga Jet…

Vonice: ¿Estás seguro que está en la casa del pendejo?
Oscar: Del Daniel, sí. Bueno, eso dicen los Ojetes.
Vonice: ¡Cuack!
Gus: Oigan pero si ese tipo es tan poderoso por qué nada más vamos nosotros, ¿qué pedo con el Diavolo?
Vonice: Ése tiene cara de pendejo.
Gus: Lo sé.
Oscar: Dejen le llamo.

Una llamada después…

Diavolo: ¿Hello?
Oscar: …
Diavolo: ¿Piano piano en italiano?
Oscar: Hey diablo, soy yo, Oscar.
Diavolo: ¿Anciano, en dónde están? Vine al cuartel y no hay nadie… No van a creer lo que pasó…
Oscar: No es momento de adivinanzas, te necesitamos inmediatamente y a todos los refuerzos que puedas traer a Veracruz, ¡a la casa de Daniel, el meón!
Diavolo: ¿Pues qué pasó?
Oscar: ¡Amenaza nivel Omega!
Diavolo: Ahh, lo bueno es que ando acompañado por un juvenal Stark, nos puede ayudar…

Vonice le arrebata el teléfono a Oscar…

Vonice: ¡Pinche cara de pendejo déjate de chistes salados y trae tu flácido trasero acá!
Diavolo: ¡Gulp, sí, jefe!

¡CUELGA!

Vonice: ¡Dame paciencia, dámela!
Oscar: ¿Eso es… sexual?
Gus: ¡Miren, hemos llegado!

Después de aterrizar limpiamente, los tres nalgones se bajan sin chistar y se encuentran con el portón de la bodega abierto por la fuerza.

Vonice: Al parecer… Alguien entró por la fuerza.
Gus: ¡Miren, es el Zombie!
Oscar: ¿Qué hace aquí?

Marvel Zombie: Otra vez ustedes… Creo que no tienen la mínima intención de desaparecer de mi vista. Bien, entonces morirán... ¡Hoy!

La batalla inicia, el gran zombie ataca a nuestros héroes pero ellos apenas pueden esquivar las embestidas del poderoso marvelero, uno a uno nuestros personajes caen frente a sus furiosos ataques. Ni las groserías de Vonice, ni la transformación en órgano sexual del Gus, ni la magia de Oscar pueden con el abominable ser.

Todos nuestros héroes son eliminados, salvo por Oscar, quien con un último aliento planea su movimiento más poderoso a la fecha. La Invocación.

Oscar: Espero que esto funcione… Invocaré un gran poder, un ser que nadie de ustedes conoció. Gastaré el 80 por ciento de mis energías, pero lo que sea para derrotarte, monstruo. Sé muy bien que no eres el Marvel Zombie, así que no habrá piedad…
Marvel Zombie: Grrr… Tenías que ser brujo.
Oscar: De hecho, amo de las artes místicas mágicas. O mejor, profeta.
Marvel Zombie: ¡Muere!

El zombie se echa encima de Oscar intentando darle el golpe final, pero nuestro camarada utiliza su técnica de invocación…

Oscar: ¡invocavergus summonrroides! ¡Oscarsaurio, yo te invoco, viejo amigo!

De repente, todo el lugar comienza a temblar y el piso genera grandes grietas hasta formar un gran cráter de donde sale Oscarsaurio, la primer mascota de Oscar.

Oscarsaurio: ¡Graaaahhhhhhhhhhhh!

Marvel Zombie: ¡Por los ojos de Matt Murdock!

El poderoso dinosaurio se come al zombie y lo mastica con sus prominentes dientes como de diamante, haciéndolo pedazos, después de unos segundos… escupe a Osmar.

Oscar: ¡Siempre lo supe! Sabía que no eras el verdadero zombie.
Vonice (recuperándose): Vaya, con razón hacía falta un reo en la prisión del Polo.
Gus (recuperándose): Salaverga y ese dinosaurio que pedo.
Oscar: Es un viejo amigo, jeje.
Oscarsaurio: ¡Hola, viejo amigo, gracias por revivirme!
Oscar: Ups… Lo siento camarada, pero la invocación sólo dura cinco minutos…
Oscarsaurio: Umm…
Oscar: Y sólo la puedo hacer cada mil años.
Oscarsaurio: (Se le sale una lágrima)
Oscar: De hecho, es hora de que te vayas… Adiós y muchas gracias por todo, nos volveremos a ver.
Oscarsaurio: Ya que…
Vonice: ¡A la verga, cuack!

Oscarsaurio comienza a desaparecer, se desvanece por las mismas grietas por las que llegó.

Oscar: Bueno, ahora a ver Osmar, ¿cómo obtuviste ese poder y lo más importante, en dónde está el Sr. B?
Vonice: ¡Ruco! ¿Qué no vez que se desmayó? Llevémoslo al cuartel y allá le haremos todas las preguntas que queramos.
Sr. B: ¡No tan rápido, idiotas!
Todos: ¡Es él!
Vonice: ¡Hey tú! Por favor… Detente.
Sr. B: ¡Jajaja! Qué débil te vez… Papá…
Oscar: ¿Papá?
Vonice: ¡No queda de otra más que eliminarlo por mí mismo!
Sr. B: Lo dudo, ya encontré todo el peyote de la bodega, ahora mismo lo llevaré con mi otra mitad, a la Ciudadela Espacial y gobernaré la galaxia.
Oscar: No te lo permitiremos.
Sr. B: Lo dudo.

Con tres movimientos fáciles e inteligentes logra derribar al trío de raros y se escapa en el Nalga Jet, su destino: La Ciudadela Viviente.

Sr. B: ¡Jajaja! Llevo el peyote necesario, ¡el universo será mío!

¡MÍOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!

¡CONCLUIRÁ!
En el próximo número: Orígen y caída.