El final de una época

¡NO DE MI ÉPOCA, NO ME DESCONECTEN!

Saludos, gente. Hace tiempo les dije que no me gustaba mucho el término de época de bronce porque tenía un inició muy ambiguo, pero en contraste su final es muy claro y vamos a verlo a continuación. Hay 4 series que en definitiva marcaron un término y obligaron a la revisión de lo que hasta entonces se hacía en la industria y advierto que sólo una es de Marvel, así que el Casto puede dejar de leer después del primer inciso.

-Secret Wars

Las Guerras Secretas fueron un parteaguas para Marvel Comics, siendo propiamente la primer megasaga que, además, involucró activamente los títulos de quienes participaban en ella (lo que hoy llamamos tie-in). Es decir, antes hubo sagas en que varios héroes diferentes peleaban contra una amenaza, pero se narraban en una o dos colecciones a lo mucho, y no guardaba repercusiones más que para los personajes centrales sin importar que el guion dijera que se sintió en todo el mundo.

Esta vez hubo una serie central de doce números en 1984, escrita por el propio editor en jefe, Jim Shooter, y dibujada por el maestrazo Mike Zeck (con Bob Layton entrando al quite cuando hizo falta), en donde se narró como una entidad cósmica llamada Beyonder, al parecer omnipotente, llevó un grupo de héroes y otro de villanos a un planeta distante, Battleworld. Ahí los obligó a enfrentarse para estudiar su dinámica y la naturaleza del bien y el mal. Inadevertidamente, este evento también comenzó otra tradición en las sagas Marvel: que Doctor Doom es capaz de ser un héroe cuando es necesario, pero siempre tendrá en mira su propia agenda. Sin duda la saga es recordada por la mayoría por haber originado el traje negro de Spiderman, que es a mí gusto lo mejor que le pudo pasar al personaje con su diseño tan impactante y estético. Dato curioso: el propio Shooter declararía alguna vez que cuando comenzaron a correr los rumores de que Spiderman tendría un nuevo traje recibieron amenazas de los lectores, diciendo que no volverían a comprar el cómic si lo hacían; como sabemos eso no los detuvo y el nuevo diseño encantó a los fanáticos, que irónicamente volvieron a amenazar a la editorial cuando el Araña regresó a su traje viejo, pidiendo que conservara el negro, jojojojojo.

Otro dato interesante es que Shooter siempre estuvo en contra de la relación de Coloso y Kitty Pryde y no era por una razón romántica sino legal; veran, en ese entonces Coloso era joven pero mayor de edad, mientras que Kitty fue creada de unos 15 años, lo que implicaba que, en sentido estricto, su relación era un estupro. Y no es que los abogados anduvieran tras Shooter, pero él sí tenía miedo de la presión que podría haber por parte de los medios si es que alguien se decidía a darle importancia a eso, así que aprovechó las Guerras Secretas para hacer que Coloso se enamorará de una extraterrestre y rompiera su noviazgo con Kitty. Otro punto alto de la trama es cuando La Mole es convertido en humano de nuevo y para continuar así decide quedarse en el mundo extraterrestre, lo que obliga a Reed Richards a invitar a She-Hulk a tomar su lugar con los 4 Fantásticos. Como dije, lo más importante de la saga es que tenía efecto en las series regulares de los personajes, así que en algunas hubo tramas alternas donde se notaba la ausencia de los héroes en el mundo, como en los 4 Fantásticos, donde La Mujer Invisible tenía que arreglárselas sin los otros y, en el caso de Spiderman, las consecuencias son por todos conocidas: el traje negro resultó estar vivo. Las Guerras Secretas tuvieron una segunda parte dos meses después del final de la primera, esta vez de nueve capítulos, pero ésa ya va totalmente por otro lado; más que una historia de acción trata sobre la busqueda de una identidad por parte del Beyonder (conocido en México como El Eterno), aunque también tiene algunas consecuencias en otros títulos, destacando nuevamente Spiderman y Fantastic Four.

-Dark Knight Returns

En 1986, Frank Miller tenía 29 años y calculaba que Batman debía tener más o menos la misma edad dentro de los cómics. Y pensaba que eso era muy injusto, porque el Murciélago fue creado en 1939 y no envejecía, y él propio Frank iría encaneciendo con el paso de los años mientras Bruce Wayne seguiría con sus 29 años perpetuos. Entonces tuvo otro pensamiento: qué pasaría si el día en que se publicó el origen de Batman, por primera vez, Bruce Wayne hubiera sido realmente un niño y a partir de entonces hubiera transcurrido su vida en tiempo real, entonces en 1986 sería un adulto mayor, de casi 60 años y... ¿seguiría siendo Batman? Algo parecido fue lo que contó Frank Miller en cierta ocasión, refiriéndose a cómo se originó en su mente la idea de un Batman anciano regresando a combatir el crimen, un concepto que fue aceptado por DC comics, como una miniserie de 4 números, bajo el nombre de Dark Knight Return, publicada en ese mismo año de 1986 y considerada a la fecha, por la mayoría de críticos y aficionados, como la mejor historia jamás contada sobre el Murciélago.

DKR trata sobre Ciudad Gótica en los ochenta, aunque en realidad nunca se dice abiertamente la época; han pasado 10 años desde el retiro de Batman, causado sobre todo por la culpa de haber visto morir a Robin, pero Bruce Wayne sigue en la ciudad y está cada vez más preocupado por la escalada de violencia encabezada por el líder Mutante y sus hombres, una banda de delincuentes de poca monta pero con lealtad incondicional a su jefe que raya en el fanatismo. Finalmente, Bruce decide retomar su lugar como defensor de Gótica, pero además establecer medidas extremas que no se limitan a la impartición de justicia sino a modificar toda la sociedad, algo que no sólo lo llevara a enfrentar a los Mutantes, también a sus viejos enemigos y al héroe más poderoso de su universo: Superman.

DKR es más que una historia de acción, es la crítica social y política, tan común Frank Miller, llevada a un punto sin retorno; los elementos que apenas exploró en Daredevil: Born Again son reexaminados aquí, conviertiendo a Batman en símbolo del liberalismo con Superman como su contraparte conservadora, mostrando además la cobardía de los políticos y la complicidad de los medios dentro de una sociedad alienada que no cuestiona ni cuando su vida depende de ello... Sí, también hay una madriza sin cuartel entre Bats y Supes. DKR fue un éxito de ventas y crítica y es referida como fuente de inspiración por gran número de escritores actuales. Dato curioso: en algún capítulo de la serie animada de Batman Beyond se pueden ver escenas del pasado de Bruce Wayne donde algunos dicen que está peleando con el líder Mutante, desde entonces se ha especulado la posibilidad de adaptar DKR a una película animada, algo que parecía imposible hasta que recientemente comenzaron a salir nuevas animaciones basadas en varias series emblemáticas de DC.

DKR tuvo una segunda parte en 2001, titulada Dark Knight Strikes Again, conocida entre los lectores como DK2, la cual fue odiada por la mayoría y yo no tendría muchos argumentos para defenderla porque sí se queda muy corta a la hora de compararla con su predecesora... el gran problema es que después de leer DKR difícilmente resistirán la tentación de conocer su continuación incluso sabiendo que podría decepcionarlos. Si se animan, ambas ya fueron publicadas por Editorial Vid. Dato curioso: según se ha dicho, la serie All-Star Batman & Robin está ubicada en el universo DKR.

-Watchmen

¿Que puedo decir de Watchmen que no se haya dicho ya? Probablemente nada, pero aún así es una mención necesaria cuando se habla de la transición de la época de bronce a la moderna. Es creación de Alan Moore y el dibujante Dave Gibbons, planeada originalmente como una puesta al día de los héroes de Charlton Comics y que ya desde hace varios años eran propiedad de DC, pero que por el carácter rudo y oscuro de la obra, la editorial decidió mantener virginales a sus protagonistas y permitieron que Moore construyera nuevos héroes.

Watchmen cuenta la historia de una sociedad donde los superhéroes fueron declarados ilegales, aunque se mantienen algunos en actividades de vigilantismo. Todo cambia con la muerte de uno de los héroes retirados, el hiperviolento Comediante, a manos de un asesino desconocido y que uno de sus viejos socios, Rorschach, sospecha podría ser parte de un complot de dimensiones globales. A lo largo de la trama, Moore deconstruye todos los preceptos heroicos de la época y nos muestra un mundo donde la existencia de superseres sí afecta los eventos mundiales y rara vez lo hace del mejor modo o para el bien social. Algunos son sólo buscadores de fama, otros son paranoicos resentidos sin límites de la moral y unos más están dispuestos a mejorar al mundo sin importar lo qué pase después. Esto planteó varios conflictos para el lector de la época y obligó a los escritores a replantear su estilo narrativo.

DC sabía lo que tenía entre manos desde el primer número (de 12) de Watchmen y no escatimó esfuerzos en promoverlo dentro del medio, se convirtió en el cómic más solicitado y aclamado por los lectores, la crítica tampoco escatimo elogios y con el tiempo toda la serie sería reconocida como el mejor cómic de superhéroes de la historia... y ahí es cuando todo se puso feo. Es bien conocido por todos que Watchmen ha sido la manzana de la discordia entre Alan Moore y DC Comics durante ya casi un cuarto de siglo, con ambas partes ostentando la paternidad del proyecto. Es fácil caer en la tentación de darle la razón absoluta a una de las partes, pero como casi siempre ocurre ninguno la tiene: por un lado, Moore hizo el guion por decisión propia, es decir, no fue un encargo de la editorial, pero cometió el error de querer usar personajes ya existentes; luego, DC también erró al obligarlo a crear héroes nuevos, pero Moore sabía desde un principio que no se trataba de Epic Comics, no era una editorial que respetara las obras de autor.

Moore no rompió de inmediato con DC, pero fue el principio del deterioro en su relación, hasta que el barbón se fue y desde entonces cada cierto tiempo se reinicia la guerra de declaraciones. Y a todo esto, Dave Gibbons como el chinito, porque él sí mantiene una relación cordial con DC Comics, pero también con Moore, y más de una vez ha pagado los platos rotos de quedar en medio. Pobre. Watchmen tuvo su adaptación cinematográfica, que es fiel al cómic casi en su totalidad y tiene excelente calidad, lo cual por desgracia no se tradujo en éxito taquillero. Hay muchos recopilados disponibles de Watchmen, desde el más económico de unos 200 pesos (que es el que yo tengo, jo) hasta uno que incluye bocetos y comentarios y que anda por los 1000 varos... también está la edición en papel higiénico de Editorial Vid.

-Crisis on Infinite Earths

Hasta 1985 existía un multiverso infinito en DC Comics. Cuando la editorial adquiría personajes nuevos, como los de Charlton Comics o el Capitán Marvel, lo único que tenían que hacer los editores era sacar un cómic nuevo donde continuaran sus aventuras y decir que estas ocurrían en una Tierra paralela. Hasta ahí todo bien, el problema es que también funcionaba como excusa para justificar los errores de continuidad: si en un número de Action Comics, Superman se encontraba con un héroe que había sido asesinado en otro título, el escritor y el editor que cometieron el error decían que esa aventura ocurrió en otra Tierra... Y bueno, algunos lectores actuales podrán decir que no es tan grave, son sólo cómics, pero el público de ese entonces no lo veía así, ellos estaban encantados con el realismo y continuidad formal de Marvel y eso se reflejaba en las ventas. DC llevaba más de una década siendo el segundo lugar y no hablo de un número 2 honroso sino con ventas terriblemente pobres.

Había que tomar medidas enérgicas y lo primero era reducir los problemas de continuidad y simplificar el universo. Los comandados para resolver el problema fueron el escritor Marv Wolfman y el dibujante George Perez, los mismos que habían transformado Teen Titans de un supergrupo terceron en el más popular de la compañía y la obra en cuestión recibió el nombre de Crisis en las Tierras Infinitas, una maxi-serie de 12 números que marcó el final del multiverso. La historia es tan sencilla como impactante: el Anti-monitor es una entidad omnipotente que busca destruir el multiverso y lo está logrando con éxito; los héroes sobrevivientes de cada realidad deben unir fuerzas para detenerlo dirigidos por Alexander Luthor, hijo de un Lex Luthor alterno. Las multiples batallas son impactante, dibujadas con maestría por el buenazo de Perez y ninguna vaca sagrada permanece intocable, pues durante la lucha vemos morir a Flash (Barry Allen), Supergirl y a la propia Mujer Maravilla, por mecionar sólo a los no-segundones, jojojojo.

El resultado de la Crisis dentro de los cómics fue la fusión de las realidades en una sola Tierra y un nuevo comienzo para el Universo DC y, en el mundo real, catapultó a DC nuevamente al primer lugar de ventas de las editoriales de cómics, posición que mantendría casi por el resto de la década hasta que, a finales de 1989, Marvel recobrara la cúspide. Pueden conseguir los 12 números de la Crisis también en edición de Vid.De los cambios que trajo la Crisis consigo tratará esta sección a partir del próximo año, donde le daremos una buena repasada no sólo a DC sino a todas las editoriales en la época moderna de los cómics. Mientras tanto, en las próximas dos semanas tendremos un par de temas también interesantes, así que no se vayan de vacaciones porque podrían perderse lo mero bueno. Y recuerden que este viernes tenemos el Polo Challenge. Adiós.