Saludos, gente. Continuaremos con nuestro recuento de lo más reelevante del inicio de la época moderna del cómic. La semana pasada vimos como Superman fue reinventando con la miniserie de seis número Man of Steel, pero se trató de un caso excepcional, pues la mayoría de personajes no podían darse el lujo de reiniciar toda su continuidad (sólo hubo un caso importante más como veremos más adelante). Con Batman, lo que hicieron fue ir actualizando personajes poco a poco y publicar en 1987, dentro de su propio cómic una miniserie de 4 números a modo de actualización del origen (números 404 a 407), se tituló Year One y fue escrita por Frank Miller y dibujada por David Mazzuchelli.
Año Uno trata sobre dos historias simultaneas en Ciudad Gótica: la primera es la llegada del teniente James Gordon al departamento de policía, la segunda es el regreso de Bruce Wayne, el gran heredero que ha pasado años viajando alrededor del mundo y, sin que nadie lo sepa, entrenando para vengar la muerte de sus padres. De entrada es notable que ninguna de las dos es una trama secundaria, ambas tiene el mismo peso y reelevancia en la creación del mito de Batman. La historia de Bruce es interesante, porque nos lo muestra como el aprendiz que comete errores y recibe buenos golpes por ello, pero que ya tiene esa voluntad de acero que finalmente lo convertirá en el mejor detective del mundo. Y el relato de Jim no es menos apasionado, es su lucha contra la corrupción de sus propios compañeros y vemos que su trabajo está destruyendo su vida personal. Ambos enfrentaran a los criminales y autoridades que hunden Gótica, primero como enemigos y al final descubriendo que son lo más parecido a un amigo que ambos han tenido en toda su vida.
La que si es una trama secundaria en Año Uno, pero no por eso menos interesante, es el primer encuentro de Bruce Wayne (sin disfraz, sólo maquillado y tratando de adentrarse en el mundo criminal) con Selina Kyle; ella se creará una fijación con el extraño y lo reconocerá aún bajo el disfraz de murciélago, que a su vez le dará el valor para vestirse de gata y vivr sus propias aventuras. Gatúbela es, precisamente, uno de los puntos sensibles de esta miniserie a nivel editorial; si han leído otros trabajos de Frank Miller sabrán que es un gran fanático de las mujeres fuertes y, digamos, no muy santas, este caso no fue la excepción pues decidió que Selina fuera una prostituta y no de cualquier tipo, sino una dominatriz.
Tras la Crisis todos los autores tenían manga ancha para hacer lo que quisieran, pero cuando años después los editores y escritores repararon en eso dijeron que no era posible que la villana (o anti-heroína) más importante de la compañía tuviera un pasado tan complicado. Primero trataron de ignorar lo hecho por Miller, pero era difícil cuando se trata de un trabajo tan reconocido y aplaudido por los fanáticos, así que intentaron cambios y la versión final es ésta: Selina no era prostituta, sólo fingía serlo porque estaba investigando a ciertos matones que trabajaban para un mafioso en particular con quien Selina compartía una conexión; lo que hacía era llevarlos hasta el hotel y drogarlos para sacarles información... que mamada, además de que contradice el espíritu de Año Uno, pero ni modo, así fue.
Series posteriores como Long Hallowen, Dark Victory y Catwoman: When in Rome, todas de de Jeph Loeb, exploran a fondo ese asunto de Selina y resulta que al tipo que investigaba era su verdadero padre; no se dejen guiar por el mal nombre de Loeb, esas series son de cuando era buen escritor y al menos las dos primeras son consideradas entre las mejores historias de Batman.
Pero volviendo a Año Uno, hay varios detalles y personajes interesantes que debo destacar: primero, Gordon se enamora de una compañera del departamento, Sarah Essen, la cual deja la ciudad, pero volvería a los cómics en los noventa y se casaría con Jim... sólo para ser asesinada por el Guasón... y ya que menciono al Príncipe Payaso del crimen, él no aparece en esta miniserie, pero sí hay una mención suya al final. Otro sin gran participación pero presente es Harvey Dent, uno de los pocos hombres honestos de Gótica y aliado de Batman. Durante la miniserie la esposa de Jim Gordon da a luz pero no se trata de Bárbara, la futura Batichica. Es un hijo varón, Jim Jr, el cual es un personaje nebuloso en el universo DC, pues nunca se le ve y sólo ha sido mencionado un par de ocasiones en todos estos años. Podemos asumir que como Jim y su esposa se divorciaron, el hijo debe vivir con ella y actualmente debería tener unos 12 o 13 años.
La hija de Jim en realidad es su sobrina, pero adoptada al morir sus padres; en otros cómics han dicho que sí es su hija biológica, sólo que la tuvo fuera de matrimonio y por eso se la entregó a sus parientes y la reconoció hasta que era adolescente... ese Gordon era una bala. Al final de Year One se deja ver que Jim conoce la identidad de Batman pero prefiere callarlo por gratitud; esta ambigüedad se ha convertido en un juego común a lo largo del tiempo, sin que sepamos que tan consciente está Gordon de los asuntos de Bruce Wayne y su familia. Año Uno fue un éxito de crítica y ventas, pero más que modificar a Batman ayudó a darle un entorno más creíble: una Ciudad Gótica oscura, temible y llena de corrupción que siempre necesitará del hombre murciélago. Por ahí del 2001 se habló de una adaptación cinematográfica de Year One, incluso hubo anuncios en revistas especializadas como Wizard, que eran idénticos a un cartel de cine y mostraban al morro Bruce arrodillado frente al cadáver de sus padres (como en la portada que les puse arriba) asegurando que estaría en las salas para diciembre de ese año... lo cual jamás pasó. Tiempo después se filtró el argumento que tenían planeado para esa cinta y era muy bizarro (lo curioso del asunto es que la adaptación estaba escrita por el propio Frank Miller y aún así no se parecía al cómic): en esta versión,después de que los padres de Bruce Wayne son asesinados, él vaga por la ciudad y lo recoge una familia humilde (sin saber que era un heredero multimillonario), de modo que crece con ellos y conoce el bajo mundo de Ciudad Gótica, estos padres adoptivos también serían asesinados cuando Bruce es adulto y es cuando descubre su herencia y se crea la identidad de Batman... pintaba para un fracaso, mejor que jamás vio la luz. De cualquier modo, si leen Año Uno podrán notar que muchos de sus elementos más representativos fueron retomado por Christopher Nolan para Batman Inicia. Year One ha sido publicado en México por Editorial Vid tanto en números individuales (tamaño media carta) como en tomo único, ambos aún localizables.
En el mismo año de 1987 apareció Batman: Year Two,que es una buena historia pero les aviso no es realmente una continuación de Año Uno ni comparte autores o estilo. Año Dos fue escrito por Mike W. Barr mucho antes que lo de Miller, sólo que cuando se lo propuso a DC en 1984 lo rechazaron porque no encajaba con la continuidad de Batman, pero después de la Crisis sí era posible usarlo y lo rebautizaron como Year Two para usarlo como una saga dentro de Detective Comics. Sí estaba planeado que esta miniserie continuara lo hecho por Miller, pero sólo hace un par de insinuaciones pues está enfocada en retomar situaciones y personajes importantes del mito de Batman que no fueron mencionados en Año Uno, como Leslie Thompkins (la mujer que acogió al niño Bruce cuando sus padres fueron asesinados).
La historia narra el regreso de La Parca, antiguo vigilante de Ciudad Gótica que usaba metodos letales y que no está muy contento con lo que el considera suavidad por parte de Batman. Para poder detener a su predecesor, el murciélago se ve obligado a hacer lo impensable: un trato con la mafia y, peor aún, hacer equipo con Joe Chill, el hombre que mató a sus padres. Para complicar el asunto, Bruce Wayne conoce a Rachel Caspian, una caritativa joven de la que se anamora y lo hace contemplar la posibilidad de casarse y dejar su vida de vigilante... y sin que ninguno de los dos lo sepa, ella es hija de La Parca. Repito que es una buena historia pero aporta poco al mito de Batman, incluso el personaje de Joe Chill ha sido borrado y regresado a la continuidad en dos ocasiones. A nivel personal, mi gran problema con Year Two es al arte, ya que el primer número es dibujado por el genial Alan Davis, pero justo después de terminarlo tuvo problemas con el editor y terminó abandonando la compañía por lo que su relevo fue Todd McFarlane, que si ahora dibuja horrible pueden imaginar como era de novato. También pueden encontrar Año Dos en edición Vid individual y recopilado.
Incluso hubo un Año Tres, escrito por Marv Wolfman y publicado también dentro del cómic regular de Batman, pero ese ya no tiene que ver con él en sí, es más bien una nueva versión de cómo conoció a Dick Grayson y su evolución como Robin hasta terminar siendo Ala Nocturna (nadie mejor que Wolfman para escribir al respecto). Volviendo a la época post-crisis, aunque no podían reiniciar la continuidad de Batman, en sus títulos regulares actualizaron villanos y personajes para la época moderna, por ejemplo el Pingüino que dejó de ser un gordo ridículo para pasar a ser líder mafioso con un pasado traumático; o Harvey Bullock que se convirtió en un policía rudo y leal, cuando en la época de bronce era incompetente y chistoso. Pero no todo fue miel sobre hojuelas. Antes de la Crisis, Jason Tood, el segundo Robin, era un personaje odiado porque tenía un origen idéntico al de Dick Grayson y eso hacía que sus fanáticos lo tomaran como una burla; intentaron hacer una revisión, ahora ligando su pasado con el villano Dos Caras, para dotarlo de identificación con el público, pero todo falló y los lectores lo seguían detestando; esto llevaría a que los editores planearan su muerte, pero ya hablaremos de eso en un futuro post. La próxima semana daremos una vuelta rápida al resto del universo DC post-crisis con la Mujer Maravilla, Flash, Linterna Verde y más. Mañana es probable que Diego no postee, pero ya tengo preparado algo por si acaso (a ver si Stark y Diavolo aprenden a avisar) y este viernes no se pierdan... no sé ni que habrá, pero igual léanlo. Adiós.
7 comentarios:
ni dark victory ni año dos se me hacen buenas, como que la primera es pan de los mismo que LH.
Long Halloween se me hace muy buena, es cuando Loeb escribia chingon y el arte de tim sale es macabro, se siente la atmósfera de terror en toda la saga, inclusive algunas veces la comparo con Hush pero pues tienen muchas diferencias las dos.
Batman Año 2 es llevada a la animación como "La máscara del fantasma" siendo casi fiel al original, arrastrada por el exito de la serie de animación: Batman.
Por la crisi del papel -y de la economia nacional- VID publica estas joyas de Batman en su minitamaño, es bastante feo leer estas series en ese formato, afortunadamente como dice el abuelo existen reimpresiones en tamaño normal de año uno y dos. Ingresaria por ahi en esta revisión 10 noches de la bestia si me apuras abuelo, pero eso te lo dejo a tu criterio sano y bueno.
Aburrrrrrrrrrrrrrr
Estoy de acuerdo con el Morcant de arriba. Sí voy a hablar de 10 noches de la Bestia no sólo porque es relevante sino porque la KGBestia es de mis villanos favoritos, nomás que avancen los post ya verás que aparece. Y pues tienes razón también en lo de los cuadernillos media carta de Vid, no eran de fácil lectura
A mí me gusta mucho Dark Victory, incluso más que Long Hallowen, pero pues cada quién.
chale
solo sabia de la existencia de año uno
pero desconocia año 2 y 3
tansolo con el nombre de año 3 se ve que es un mamada
aun no he leido año 1
Asi es long haloween es al riata, eso de batman y spiderman blue y hulk: gray son lo mejor de loeb... de ahi en fuerapuro bodrio!
Este post lo leí.. y meeeeh! solo year one lo he leido y es altamente recomendable, si te gusta el murcielago o miller.. O AMBOS!:)
Exijo post marvelero!1 minimo pn algo de amrvel ruco o te demandare!
No me asustas, Daniel me defiende... momento, es no sonó alentador
Yo quiero leer Año Uno, y Long Halloween. Lo único que me desagrada un poco de los TPB's de DC es que la calidad del papel que usan no es tan buena como la de sus publicaciones regulares. Sin embargo, creo que la próxima vez que me pare en una tienda de cómics, compraré esas dos series.
Por Año Dos y Tres, la verdad, no sé si leerlas; si el anciano venerable dice que no le aportan mucho, pues como que no tiene mucho caso, ¿verdad? Morcant, a ver si un día de estos nos juntamos, y me dejas ver esos media carta, que sí conocí, pero que nunca compré. :(
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