Hoy no hay chiste

ÉNTRENLE

Saludos, gente. Continuemos con nuestro recorrido por el año de 1990 y comenzamos con más de DC Comics, que les dio una verdadera sorpresa a los lectores de Superman el último mes de ese año, cuando los editores decidieron matar al supervillano más antiguo de la editorial: Lex Luthor.

La cosa fue más o menos así: desde tiempo atrás Luthor usaba un anillo de kryptonita para protegerse de un posible ataque del Hombre de Acero y al mismo tiempo presumir su joyita verdosa que se veía bien fashion, con lo que él no contaba era que, aunque la radiación de ese material sólo es mortal de inmediato para los nativos de Krypton, también termina dañando a los humanos si se exponen a ella por tiempos prolongados y... ¡tómala! Que el calvito se consigue un cáncer marca diablo. Tuvieron que amputarle la mano en la que había estado usando el anillo (derecha), pero eso no bastó y su médico particular y amante, la doctora Kelley, le informó que moriría a más tardar en un año; no pensaba irse en silencio, así que planeó algo grande. En la nueva continuidad, Luthor inició su fortuna diseñando aviones... bueno, en realidad la inició matando a sus padres y cobrando el seguro de vida, pero diseñar aviones fue la primera cosa legal y aparatosa que hizo, así que anunció al mundo que volvería a sus raíces diseñando, construyendo y tripulando una nave con la que rompería el record de velocidad, sólo que en realidad era misión kamikase y fue a estrellarse a Perú (en serio, fue en Los Andes).

Superman fue el primero en llegar a la zona del impacto y se hizo oficial la muerte de uno de los hombres más ricos del planeta y el mayor sustento de Metropolis... porque esa fue la parte más interesante de la muerte de Luthor, que no murió desenmascarándose como el villano que siempre ha sido, sino que en la mente de la población general era un hombre noble y necesario para la estabilidad financiera. Durante los siguientes meses en los títulos de Superman mostraron lo necesario que era Lex para Metropolis, quizá más que Supes, ya que ahora la ciudad se sumía en su peor crisis económica, dejando a mucha gente sin empleos incluido el propio Jimmy Olsen.

Las sorpresas apenas empezaban, porque unos meses después hace su aparición el hijo perdido de Lex Luthor y la doctora Kelley, conocido como Lex Jr o Luthor II, era casi idéntico al padre, pero obviamente más joven, cabelludo y barbón. Ahora, desde el principio había algo sospechoso con la muerte de Luthor y la llegada de su vástago, ya que nunca se ve el cadáver del padre y a la doctora Kelley le dicen en un capítulo que debe ir a conocer a su nuevo hijo. Pronto se nos reveló la verdad: Lex Luthor Jr era en realidad el mismo Luthor, pero en un cuerpo clonado por el Proyecto Cadmus. Eso lo sabíamos los lectores, pero dentro del cómic todos fueron engañados y el nuevo Lex hizo creer a Supes que era su amigo, estaba al tanto de la maldad de su padre y quería ayudar a corregir las cosas... y lo más importante, también engañó a Supergirl y hasta se la anduvo comiendo el méndigo.

Luthor II estuvo vigente hasta mitad de los noventa, es decir, también durante la muerte de Supes, tiempo en el cual se convirtió en protector de Metrópolis junto a Supergirl, usando una armadura de combate, pero no es que de verdad se hubiera vuelto bueno y su maldad estalló poco después, cuando una enfermedad aquejó a todos los clones creados en Cadmus y el nuevo cuerpo de Lex comenzó a deteriorarse. La verdad de quién era se reveló y esta vez se fue con todo contra sus enemigos, destruyendo a toda la ciudad en proceso, en la saga conocida como La Caída de Metrópolis. Fue derrotado y cayó en coma. Poco después los editores quisieron regresar al personaje a sus raíces y Lex hizo un trato con el demonio Neron para recuperar su cuerpo y salud, alegando que todo fue un engaño de Cadmus, que él no tuvo nada que ver con ese clon mentiroso y era inocente de todos los engaños y destrucción; como suele pasar en los cómics los héroes sabían que mentía pero la gente de Metrópolis se la tragó enterita, lo cual suena ridículo hasta que vemos todos los políticos e industriales que en la realidad nos dicen yo no fui y ahí va la gente de mensa creyéndoles.

En fin, con eso terminamos DC y ahora unas menciones de otras compañías. Primero que en 1990, Harris Comics compró los derechos de los personajes de la desaparecida compañía Warren Comics y por tanto, significó el regreso de Vampirella a las historietas. Ya hace tiempo les platiqué largo y tendido sobre ella así que sólo se los menciono para que lo tengan presente.

Luego, en 1990 aparece el cómic Men in Black, basado en la leyenda urbana de los agentes secretos del gobierno que se encargan de desaparecer la evidencia sobre asuntos extraterrestres. Fue creado por Lowell Cunningham y editado por Arciel Comics. La editora original de esa miniserie despareció y los derechos fueron comprados por Malibu Comics, que sacó otras 2 miniseries. Seguramente casi todos conocen Men in Black gracias a las dos películas con Will Smith, las cuales tengo entendido que, como ocurre con muchas adaptaciones, sólo tomaron algunos nombres porque la temática es muy diferente. Como les dije hace poco, Malibu fue adquirida por Marvel y los Hombres de Negro pasaron a ser su propiedad, pero ellos sólo han sacado adaptaciones de las películas, nunca una serie regular.

Pasando con los cómics independientes en 1990 aparece Madman de Mike Allred. Se trata de un agente del gobierno que muere en un accidente y, al estilo Frankestein, dos científicos lo regresan a la vida sin saber que eso le otorgó poderes mentales y empáticos, que manifiesta de modos muy raros, ya que puede hacer cosas como saber todo de una persona con sólo tocarla, hasta tener vistazos del futuro. Madman no es propiamente una parodia, pero si maneja un humor raro y hasta difícil de digerir... o eso tengo entendido, porque honestamente hay algo en el estilo de Mike Allred que me aleja de su trabajo.

Ya para terminar, no quiero dejar de mencionar uno de los casos más interesantes en la historia del cómic independiente. En 1990 comenzó a publicarse Boiled Angel, una historieta de la autoría del desconocido Mike Diana, un artista de Florida que lo distribuía personalmente en las tiendas de cómics; tengo entendido que más que una historia, era una sucesión que escenas violentas, lo mismo de mutilaciones que de incesto y demás linduras. Los pocos críticos de cómic que la leyeron la señalaron como digna de censura, pero al ser una publicación local no habría pasado de ser una buena anécdota hasta que el asunto se puso kafkiano. Resulta que dos años después en el mundo real, la policía de Florida investigaba una casa donde se cometió un asesinato, localizaron objetos pertenecientes al criminal y uno de ellos era un cómic de Boiled Angel. Mike Diana fue detenido y procesado como principal sospechoso.

Desde luego que el pobre wey no tenía nada que ver con los crímenes y fue exonerado cuando el verdadero matón fue arrestado, pero la policía había hecho el ridículo y no lo dejarían ir tan fácil. Un fiscal le fincó cargos por considerar su material obsceno y aunque pareciera un claro caso de atentado contra la libertad de expresión, la acusación prosperó y Mike Diana tuvo que pagar una pequeña cantidad. Pero la cosa no acabó ahí, pues el autor no desistió, sacó otro número de Boiled Angel aun más grotesco que los anteriores y esta vez se fue al bote (aunque salío bajó palabra), tuvo que ir a terapia y realizar servicio comunitario.

Hubo más juicios y más condenas, porque Diana siempre perdía y la persecusión fue tal que decidió mudarse a Nueva York, donde fue recibido como celebridad mediática y hasta una obra de teatro fue inspirada en su caso. Aunque dejó de dibujar Boiled Angel, los ejemplares ya existentes se volvieron artículo de culto, actualmente son costosísimos y prácticamente imposibles de conseguir, además de que sigue haciendo dibujos bizarros para algunas editoriales pequeñas. Dato curioso: además de la mencionada obra de teatro, existe un capítulo de La Ley y el Orden (unidad de Víctimas Especiales) en donde encuentran un cómic independiente en casa de un violador, los crímenes son idénticos a los descritos en la historieta por lo que el autor es detenido; se dice que ese capítulo podría estar basado en la historia de Mike Diana, lo cual no sería raro si consideramos que los mismos escritores de esa serie han declarado que basan sus guiones en los encabezados de los periódicos.

Por hoy es todo, ya terminaron las nominaciones de los óscares, pero las votaciones actuales seguirán hasta el viernes y luego regresaremos a las encuestas normales. Les aviso que la ceremonia de premiación será en la primera semana de mayo, antes de que la gente del teatro Kodak se entere de que nuestro cheque no tiene fondos. Adiós.