Todo es tan malo como parece

Saludos, gente. Tenía pendiente una lista muy importante que no puedo seguir demorando: Los 10 Escritores menos Chipocludos del Cómic. Como siempre les recuerdo que esta es una lista personal y todos pueden poner la suya propia en los comentarios; no olviden ser muy analíticos y diferenciar los que no les gustan o han tenido malos periodos de los que realmente les molestan. Esto no se trata de premios, números de seguidores o relevancia, simplemente gustos. Por ejemplo, muchos odian a Jeph Loeb y yo también le hago muchas bromas, pero cuando pongo en una balanza sus trabajos horribles (Rulk, Ultimates 3, Ultimatum) y los geniales (Spider-Man Blue, Long Halloween, Dark Victory) no puedo evitar que el peso se incline a su favor y le siga teniendo aprecio. Lo mismo me ocurre con John Byrne, que cometió un pecado capital con Spider-Man Chapter One y su etapa en Wonder Woman, pero al que no puedo odiar cuando pienso en sus 4 Fantásticos o el insuperable Man of Steel. Otro caso interesante es el de Paul Jenkins, que ya les he dicho no me gusta su estilo depresivo, además de haber creado al lameloide de Sentry, pero no alcanzó a entrar en mi lista porque también he disfrutado unos de sus trabajos, como Origin. O Justin Gray con Jimmy Palmiotti que es un dúo aplaudido por la crítica en más de una ocasión, pero no me gusta lo que he leído de ellos, quizá porque me salté su Power Girl, que dicen es su mejor trabajo. En fin, podría seguirme con otros pero creo que ya quedó clara la idea.

*Mención especial al lugar número 11 de mi lista: Scott Lobdell, que no me desagrada pero empieza bien y siempre se cae al final. Es un autor que lleva años dando la impresión de que se convertirá en uno de los grandes y nomás no consigue dar el salto y se conforma con las sagas medianas.

Vamos con los 10 primeros.

10.Peter Milligan

Otro autor con el que jamás he empatado. Y reitero que esto se trata de gustos, porque es obvio que muchos simpatizan con su trabajo o no llevaría una trayectoria tan larga y productiva. Yo nada más de ver su X-Statix y sus X-Men, me doy por descontado entre sus seguidores.

9.Jim Valentino

Todos los fundadores de Image (excepto Erik Larsen) tenían el mismo problema: no le interesaba que su trama no fuera a ningún lado, escribían páginas con una o dos viñetas por página y así se seguían, dejando todo el peso al dibujo. Y el caso de Valentino era aun más escandaloso, porque no era una figura inmediatamente reconocible como Jim Lee o Rob Liefeld. Su Shadowhawk era un mero tributo a la violencia sin sentido ni razón.

8.Todd Dezago

Nunca entendí qué meritos presentó Dezago para hacerlo uno de los guionistas de Spider-Man en los noventa, cuando era la segunda franquicia más redituable de Marvel Comics. Pero claro, tomemos en cuenta que hablamos de los años de la Saga del Clon, así que creo que el único requisito era tener una máquina de escribir.

7.Dale Keown

Este no fue fundador de Image pero tenía toda su escuela. Traía consigo el prestigio de haber sido uno de los dibujantes más aplaudidos de Hulk y pensó que haciendo su propia versión del mismo personaje (Pitt) bastaría para mantener contentos a sus seguidores. Pronto descubrió que no es lo mismo tener a Peter David diciéndote que dibujar y encargándose de los diálogos cerebrales que hacerlo por su cuenta.

6.Terry Kavanagh

Otro escritor que estuvo en los años más horribles de Spider-Man, con relatos simplones que, ya no digamos que no aportaron nada al mito arácnido, sino que ni siquiera eran divertidos.

5.Marc Guggenheim

Este no tiene la excusa de haber vivido un mal periodo de Spider-Man, al contrario, cuando entró a guionizarlo estaba en un momento mediático perfecto, cuando los ojos de todos los lectores (y hasta las televisoras) estaban puestos sobre el arácnido tras la escandalosa saga One More Day. No lo odio, porque le leí al menos dos buenos guiones (números sueltos, no arcos argumentales), pero no tiene el nivel para los grandes personajes, como reafirmó tras su deserción de Action Comics.

4.Bob Gale

Y si Guggenheim no fue el peor de los llamados “cebritos arácnidos” fue gracias a que ahí estaba Gale. Creo que el medio editorial se deja apantallar cada vez que un escritor venido del cine anuncia sus planes de hacer cómics y le abren las puertas sin mayor prueba de su nivel, mucho más en el caso de este hombre cuya mayor credencial fue el guion de Volver al Futuro.

3.Rob Liefeld

Si con ver a Liefeld dibujar duelen los ojos, intentar encontrar profundidad en sus historias es tarea suicida. Al igual que con los imagos antes citados, sus guiones eran una secuencia inconexa y jamás se tomó más de dos páginas para establecer motivaciones y personalidades de un protagonista. Con el tiempo se rodeó de co-guionistas que le echaran la mano... casi todos igual de maletas, pero al menos hizo el esfuerzo.

2.Todd McFarlane

Liefeld al menos estaba consciente de que escribía historias de acción, pero el idiota de McFarlane era pretencioso, creía que sus relatos eran existencialistas y no necesitaba ni buscar un equilibrio entre las peleas y la charla. Recuerdo ejemplares de Spawn donde él salía en dos páginas y el resto era un soporífero espantoso. Al menos hay que reconocer que McFarlane contrató buenos guionistas para auxiliarlo... y luego los maltrataba, pero esa es otra historia.

1.Geoff Johns

Okey, empezaré por recordarles que yo fui fanático de Johns. Lo recalcó porque una ocasión alguien me dijo que yo hablaba mal de él porque no conocía su trabajo: lo conozco, sé lo buen escritor que puede ser y las grandes tramas que construye. Eso hace que me moleste más su obsesión por revivir a sus héroes preferidos, aunque sus sucesores ya tengan una carrera sólida y en contraste, a su Star Girl la mete hasta en la sopa. Detesto su fijación con la época de plata y su miedo al cambio si no lo conduce él. Y sobre todo, me enferma su falta de respeto por otros autores, que llevó al colmo cuando hizo un reboot de todo el universo DC, excepto para el personaje que él escribía (Batman también se salvó sólo porque lo guionizaba Grant Morrison, otro intocable actual), lo cual es una patada a todas luces para el trabajo de sus colegas. No es sólo que no me guste Geoff Johns, odio su trabajo y créanme que es una tristeza, porque aún recuerdo cuando lo conocí en The Flash y pensé que sería uno de mis grandes favoritos en un futuro cercano.

Eso es todo, los invito a hacer su propia lista en los comentarios o sólo criticar la mía. Adiós.