Basada en la vida real del doctor en psiquiatría William Moulton Marston, creador de Wonder Woman, esta cinta nos narra su reunión, durante la Caza de Brujas de los años cincuenta, con el consejo que está investigando el porqué del contenido sexual del personaje. Él narrará la génesis del concepto, comenzando con el momento en que, estando casado con la también especialista Elizabeth Marston -que no poseía un doctorado sólo porque la universidad no lo contemplaba para las mujeres-, conoció a Olive Byrne, una joven e inteligente estudiante que empezó una relación con William, pero también con Elizabeth. La trama girará en torno a las inconveniencias morales y sociales que esta relación tripartita conllevaba y cómo influenció la creación de la Mujer Maravilla (y el detector de mentiras).
Todos los fanáticos de los cómics conocemos la anécdota de la vida sentimetal del buen doctor Marston... al menos los que no sólo leemos cómics sino su historia y, siendo estrictos, la cinta se toma muchas libertades, inventa anécdotas y hasta cambia los eventos historicos, también frivoliza algunos pasajes de la vida de los protagonistas, dando demasiado énfasis en los fetiches sexuales de la familia Marston. Pero con todo y eso, hablando de ella como película, lo hace bien. A final de cuentas son mentiras basadas en hechos y prácticas reales del trío retratado y en la realidad las creencias de supremacia femenina de Marston iban más allá de lo que aquí muestran.
Hay que separar los hechos de la cinta y gracias a su inexactitud histórica la trama es entretenida, no como otras biografías que de tan fieles son aburridas y las actuaciones y dirección son muy buenas. Véanla como entretenimiento y luego lean una biografía real.
Por último, hay un detalle molesto en la traducción del título, porque el original era Proffesor Marston and the Wonder WOMEN, o sea Mujeres Maravilla, y ese plural es vital para comprender la importancia que tuvieron ellas en la vida del buen doctor.
3.5 papas.
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