Saludos, paisas. La última vez que pasamos por esta sección, les platicaba sobre los ojos blancos en las máscaras y antifaces de superhéroes, que pese a carecer de lógica en el mundo real, los lectores hemos llegado a aceptarlos como una convención del género. Hoy veremos otra licencia artística que aceptamos como un hecho aunque no lo sea: las máscaras que se convierten en una segunda piel para su portador. Es decir, cuando uno se pone una tapa con el fin de cubrir tu rostro, ocultar tus expresiones o, incluso, mantener una imagen perpetua; y esa es precisamente su función en los cómics, en teoría, pero es también un obstáculo para el dibujante, porque una capucha de rostro completo y con ojos malvados impediría saber si el sujeto que oculta está triste o riéndose.
Sin embargo, históricamente, los artistas echan mano de las licencias para manipular los rasgos de una máscara. Por ejemplo, si el tipo está triste, pues sus ojos se curvan hacia las mejillas, hasta recuerdo un par de casos donde el héroe lloraba a través de su máscara, fundiéndose el color de pupilas y lágrimas. Ahora, siendo justo, la mayoría de los ojos blancos que vemos se supone representan agujeros así que, técnicamente hablando, en el mundo real podríamos ser capaces de verlos y, por tanto, reconocer sentimientos en ellos; pero vayamos con el ejemplo de Spiderman, que aclaramos la vez pasada no tiene huecos sino lentes de una sola vista y aun así hay autores que hacen que se encojan, se abran, se curven y demás. Y en la otra duda que les planteaba, cómo saber si el tipo se está riendo o gritando bajo una capucha de rostro completo y sin ayuda de una onomatopeya... ¡pues porque su boca se marca en la tela! Como si la tapa fuera su verdadero rostro o, de menos, la hubiera mojado antes de ponérsela y todo se le pegara. Dependiendo del artista, incluso se podrían marcar rasgos diminutos del individuo en la tela de su cubierta, como las arrugas de la frente o las comisuras de los labios y lo irónico es que ese desapego a la realidad es lo que los fanáticos solemos reconocer como atención al detalle. Digo, el Duende Verde (y demás duendes) hasta gritan y sonríen con su máscara. Y si eso no fuera lo suficientemente bizarro, hay dibujante que ponen expresiones en la armadura de Ironman o el casco del Doctor Fate y no me vengan conque en este último caso es producto de la magia.
Esta sección no es un reproche, no estoy criticando que hagan esto, al contrario, aplaudo los recursos cuando están bien logrados y busco resaltarlo porque es una de esas cosas que los fanáticos de los cómics estamos tan acostumbrados a ver que dejamos de apreciar su ingenio. La próxima vez que encuentren uno de estos ejemplos no lo pasen de largo como un dibujo más y noten la capacidad de los creativos para hacernos olvidar las leyes físicas y entrar en su ideal gráfico. La próxima vez veremos algo totalmente diferente, hasta entonces.
7 comentarios:
porqueria de post
Gran post abue, tienes toda la razón, iba a comentar lo de Iron Man, pero me ganaste. Es cierto pues he visto que en los orificios del casco se muestren sus gestos jajaja.
Jojojo, sí se ve mamón, pero funciona
Igual he notado lo del Caralata, pero a mí sí me molesta cuando le agegan expresionas faciales a la armadura.
Eso es porque sí he visto ejemplos de artistas que tienen la habilidad de demostrar emoción sin cambia la boja o los ojos. Se valen de ángulos y sombras para dar el efecto.
Eres muy exigentito, pingu
Se entiende que se tomen esas libertades con las mascaras en los comics, acentuando la emocion del momento. Pero lo que me caga es el Spiderman-Disney de las caricaturas actuales, el que sale haciendo y diciendo pendejadas y que los ojos de la mascara a cada rato se mueven y hacen expresiones bobas tipo anime.
jojojojojojo. La verdad tampoco me gusta mucho Ultimate Spider-man, así que no lo defenderé
Publicar un comentario